viernes, 3 de junio de 2011

No es una fábula.


Aceptar a la sorpresa como una auténtica opción para reconocernos en el ahora.
...porque nos saca de todo a lo que estamos conectados, rendimiento laboral, pago de deudas, cosas a hacer, niños, metas, sueños...
Es simplemente la posibilidad de no dudar que ese momento es nuestro.

O mejor aún, es la confirmación que, ser fuerte es caerse, es volver a comenzar, es no renunciar a creer en lo imposible. A confiar que lo que sentimos no es una fábula.